Cuenta Mike Cooper, editor del blog inglés Electricpig que ya es una tradición en su familia que haga tartas de cumpleaños cada vez más ridículas para los cumpleaños de sus hijos. Este año no iba ser menos y para celebrar el sexto cumpleaños de Ben, el bueno de Mike hizo una tarta inspirada en el ya casi mundialmente conocido juego de los Angry Birds. Y no contento con eso Mike le dio realismo a su tarta haciendo que se pudieran lanzar los pájaros contra la estructura donde se parapetan los cerdos, igual que en el juego.
Lo mejor sin duda fue la cara del pequeño Ben cuando vio la tarta… y cuando consiguió destrozarla.
La historia ha aparecido en Mashable, Gizmodo e incluso citada en el twitter de Rovio (los creadores del videojuego), así que Mike no ha tenido más remedio que publicar la receta completa de la tarta con todo lujo de detalles.